Un perno de suspensión generalmente consta de dos partes: un extremo roscado en forma de tornillo y un extremo en forma de tirafondo. El extremo roscado se utiliza para penetrar y asegurar la estructura de montaje del panel solar, como sistemas de estanterías de madera o metal. El extremo del tirafondo se utiliza para anclar el perno de suspensión a la superficie, como un techo o el suelo. El proceso de instalación implica perforar un orificio piloto en la estructura de montaje, insertar el perno colgante en el orificio y luego apretarlo con las herramientas adecuadas. El extremo roscado proporciona una conexión segura, mientras que el extremo del tirafondo garantiza la estabilidad y evita que el perno colgante se salga debido al peso y las fuerzas ambientales que actúan sobre los paneles solares. Los pernos de suspensión suelen estar hechos de materiales duraderos, como acero inoxidable o acero galvanizado, para resistir las condiciones exteriores y proporcionar estabilidad a largo plazo. Están disponibles en varias longitudes y diámetros para adaptarse a diferentes sistemas de montaje y requisitos de instalación. Es importante tener en cuenta que, si bien los pernos de suspensión se usan comúnmente en instalaciones de paneles solares, los requisitos específicos y el hardware recomendado pueden variar según el fabricante, el sistema de montaje y los códigos de construcción locales. Por lo tanto, siempre es recomendable consultar las pautas del fabricante o buscar asistencia profesional para garantizar una instalación adecuada y el cumplimiento de las normativas pertinentes.